Mi 8 de MARZO de 2022 va dedicado a las madres ucranianas que están defendiendo a sus hijos del horror de la guerra.
Es la guerra
El fantasma del miedo avanza por las calles,
se esconde en los refugios,
y se sube en trenes que lo arrastran por el mundo…
Miedo sonoro. Ruidos de muerte.
Miedo que anida en las almas
y penetra en el objetivo de una cámara
desde infiernos de fuego,
miedo que viaja escondido en una maleta
y no puede ver el llanto de los girasoles,
miedo que congela la sonrisa de un niño
y los muchos porqués
que se estrangulan en sus labios.
Miedo. Miedo. Miedo.
Cuerpos insomnes,
caras de dolor,
gestos de rabia,
y almas ansiosas de paz
hacen barreras para contener la barbarie.
Millones de seres desvalidos
son convertidos en números:
de combatientes,
de muertos,
de heridos,
de refugiados…
De seres que solo ansían
días luminosos y noches serenas.
¡Miradlos! Ahí están.
Entre imágenes de desolación,
hay niños con un peluche en las manos,
que miran ansiosos las caras de sus madres,
esas madres
que siempre les regalaron la seguridad del abrazo,
que vigilaron su sueño,
que sirvieron de escudo
ante los males del mundo…
Y sienten miedo,
porque hoy esos ojos,
de miradas rotas,
son ojos que lloran.
Roto su mundo. Roto su futuro. Rota su alma.
La imagen de un niño solo,
con unos números de teléfono
apuntados en la mano,
buscando caminos de paz,
nos taladra la conciencia.
Es el sinsentido. Es la injusticia.
Es la guerra.
8 de MARZO DE 2022, DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER
Enhorabuena Margarita. BUENA falta hace un apoyo moral para estas mujeres, amén de otras materiales que ignoramos si les llegarán, pero eso no impide aportar lo que sea. Gracias Margarita por estos versos de compromiso
ResponderEliminarCarlos Junquera
Gracias, Carlos. Los ciudadanos ponemos la palabra y algo de ayuda material. Y deseamos paz...
EliminarQué bonito, Margarita! Me emociono �� Ojalá acabe pronto esta pesadilla �� Feliz día de la mujer y un abrazo enorme!
ResponderEliminarGracias, Alina. ¡Feliz 8M!
EliminarGracias
ResponderEliminarGracias a ti, por tu gratitud.
EliminarNo tengo palabras para algo así, mi corazón sufre con ellas que son las verdaderas guerreras de ésta guerra sin sentido. Dios ayude a estas madres a salir adelante por sus hijos y les de la fuerza que necesitan, y conciencie las almas de los seres que hacen de éste mundo un horror.
ResponderEliminarHoy estamos especialmente con esas madres. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
EliminarOtra vez lágrimas en los ojos. Un abrazo.
ResponderEliminarMluisa
Lágrimas de desolación ante las que nos sentimos impotentes. Al menos levantemos la voz. Un abrazo.
EliminarEfectivamente es el sinsentido de la guerra, el dolor de tener que huir para proteger a tus hijos y a tus padres mayores de la muerte, dejando,posiblemente, a tu marido y padre, jugándose la vida en la calle. Gracias, Margarita.
ResponderEliminarAsí es el desolador panorama que destruye el presente e hipoteca el futuro. Gracias, Fuencisla.
EliminarPienso que todos los que estamos por la paz, estamos con todos los que sufren, por culpa de un desalmado sin escrúpulos. Y aunque les ayudemos en lo que cada uno de nosotros podamos, no es lo que más necesitan.
ResponderEliminarGracias por el comentario. Evidentemente necesitan paz y eso no se lo podemos dar fácilmente, pero al menos nos queda la palabra para condenar esta sinrazón. Me quedo con los versos de Blas de Otero:
Eliminar"Si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la palabra".
Las guerras desgraciadamente es lo que traen , hay guerras más silenciosas,pero que igualmente expulsan a los ciudadanos de sus países y tienen que andar esparcidos por el mundo, es muy triste dejar tu vida atrás de un dia para otro. Eso solo lo sabe quien lo vive. Nunca olvidas. Viky Machado
ResponderEliminarEs verdad todas las guerras producen dramas, incluso esas que no son llamadas así. Tener que salir de la tierra donde uno vive, de manera forzada, produce desarraigo y dolor. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
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