tag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post3892694596653684998..comments2024-03-10T05:03:27.079-07:00Comments on De la palabra al pensamiento: Los miedos de nuestra infanciaMargarita Álvarez Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/03991811161711656223noreply@blogger.comBlogger6125tag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-5338173349467590962019-10-29T05:14:29.110-07:002019-10-29T05:14:29.110-07:00Gracias, Fuencisla. Los miedos son consustanciales...Gracias, Fuencisla. Los miedos son consustanciales al ser humano, pero en la infancia de los niños de hace medio siglo, especialmente en el mundo rural, los miedos eran alentados por los adultos, con intención de asustar o como una forma de transmitir las leyendas... A pesar de todo, aquellos miedos nos fortalecieron. Margarita Álvarez Rodríguezhttps://www.blogger.com/profile/03991811161711656223noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-36577078483194861402019-10-29T01:57:24.676-07:002019-10-29T01:57:24.676-07:00El miedo a Camuñas, al coco, al hombre del saco, a...El miedo a Camuñas, al coco, al hombre del saco, a los gitanos, al sacamantecas, a la oscuridad... creo que son comunes a todos los que pasamos nuestra infancia por aquellos años tristes y difíciles, en mi caso había otro que me sobrecogía, el miedo a las arañas que podían trepar a mi cama por la noche y picarme en la cara. Afortunadamente, o no, los tiempos han cambiado, los miedos de los niños de hoy creo que son muy diferentes. Muchas gracias.Fuencisla Avialhttps://www.blogger.com/profile/10830309821971327258noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-52961205598080612052019-10-26T13:48:50.384-07:002019-10-26T13:48:50.384-07:00No me puedo dirigir a ti por el nombre, porque no ...No me puedo dirigir a ti por el nombre, porque no aparece en el comentario, de todas formas gracias por las palabras que dedicas al artículo. Aquello que hemos vivido siempre nos inspira alguna reflexión y especialmente los miedos, porque quedaron muy grabados en el recuerdo. Saludos.<br />Margarita Álvarez Rodríguezhttps://www.blogger.com/profile/03991811161711656223noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-7204161604339950422019-10-26T11:53:18.633-07:002019-10-26T11:53:18.633-07:00Muchas gracias por tu comentario. Los miedos nos a...Muchas gracias por tu comentario. Los miedos nos acechaban y eran muy variados... Pero eso de comerse a los niños crudos -lo mismo sería si fuesen cocidos- era una forma de asustar bastante cruel. A pesar de todo, sobrevivimos a los miedos. Margarita Álvarez Rodríguezhttps://www.blogger.com/profile/03991811161711656223noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-28172399215555346192019-10-26T11:23:31.193-07:002019-10-26T11:23:31.193-07:00Muy buen ensayo.bien centrado, expuesto con clarid...Muy buen ensayo.bien centrado, expuesto con claridad e históricamente muy desarrollado. El ayer, cercano aún, nos devuelve al mundo de la infancia. Gracias MargaritaCarlos junquerahttps://www.blogger.com/profile/16119681240496039251noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1420781650255672274.post-61606142597940233342019-10-26T08:55:19.773-07:002019-10-26T08:55:19.773-07:00Suscribo todos los miedos que teníamos en los pueb...Suscribo todos los miedos que teníamos en los pueblos de niños, y además añado uno tremendo que tenía yo; alguien me dijo , que un hombre de Las Omañas que tenía una huerta cerca de nuestra casa, se comía los niños crudos; cada vez que lo veía, no sabía donde guardarme. Por otra parte, este hombre era una gran persona, y cando fui mayor fuimos amigos, y nos reíamos al comentar esto. También teníamos miedo cuando asomaba un avión, ya que pensábamos que nos iba a tirar una bomba; eran épocas de guerra.<br /> Saludos Margarita.AURELIANO ARIENZA PEREZhttps://www.blogger.com/profile/14149388350177790921noreply@blogger.com