"Los límites de mi lengua son los límites de mi pensamiento". Wittgenstein
martes, 17 de abril de 2012
De colorido leonés: catarros leoneses
Con la friura que en estos
días se siente por las tierras leonesas y la tafarada nauseabunda que
inunda la capital del antiguo Reino, será inevitable que llegue algún andancio
que vaya acompañado de calentura alta y que provoque en los pacientes tembluras
yestremezones.
Cuando
el catarro ataca a los leoneses nos produce una tosedera persistente, refervedera
en el pecho, picacadera del gañato, y no podemos evitar esperriar.
Nos duelen los remos, el cogote y las vidayas. De nuestra nariz empieza
a manar la moquita, que, poco a poco, se transforma en una espesa moquera.
Para evitar que se nos caiga de la nariz de manera inoportuna, cuando no
tenemos moqueros,sorniamos; pero los niños, que no saben sonarse
la mocada que tapa sus vías nasales, dejan que esta cuelgue y alumbre
sus caras con unas luminosas velas y candelas, que, una vez secas, se
convierten en cascarrias.
Pero si el catarro se resiste, siempre nos
quedará un buen fervidu de leche cocida con miel y orujo. ¡Salud!
Desde Riello...Margarita Álvarez, nuestra ENHORABUENA por este blog...(éxito seguro)
ResponderEliminarUn fuerte abrazo "omañés"
Bienvenida al mundo bloguero. Saludos desde el Instituto de Estudios Omañeses.
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