viernes, 16 de mayo de 2014

Ecos de despedida

                                                                   
  Un abrazo de libertad      


     A mis sesenta y siete alumnos de 2° de Bachillerato, una cita y sesenta y siete palabras
                         

Grabado de Doré


   


La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar encubre; por la libertad así como por la honra se puede y se debe aventurar la vida y, por el contrario, el cautiverio es el mayor mal que puede venir a los hombres.

El Quijote, II, 58       


Libertad  compartía  morada con  Ignorancia, Apatía y Resignación. Era un lugar triste que la hacía infeliz.

Un día entró en la casa de Sofía. Los moradores  eran centinelas sigilosos que alineados custodiaban las paredes.

Tímidamente Libertad extendió sus manos hacia ellos. Se sintió envuelta en un abrazo de papel. Letras juguetonas le hacían  carantoñas e iban componiendo nuevas palabras: Gratitud, Tolerancia, Justicia, Utopía… 

                                                             
                             Y la llamaban Libertad.





                                                Margarita    
                                                                  Álvarez  Rodríguez                                                                           
    
                                                           A mis alumnos de 2º de bachillerato 
                                               del Colegio Salesiano Santo Domingo Savio. Madrid

7 comentarios:

  1. UN CUENTO, BREVE DE FORMA; GRANDE DE CONTENIDO.

    La palabra SOFÍA está relacionada con la filosofía y filosofía viene de “filos”: amor y “sofía”: sabiduría.
    Para los griegos el amor a la sabiduría suponía querer salir de la ignorancia y de la apatía, y no aceptar la resignación si se podían barajar otras posibilidades para salir de las situaciones difíciles.
    La sabiduría llevó a los griegos a la democracia, pero para que haya democracia tiene que haber tolerancia y justicia. Y no se puede llegar a la utopía desde la ignorancia.
    Platón, en el mito de la caverna, nos expone la situación de unas personas que están atadas en el fondo de una cueva y sólo pueden ver imágenes falsas de la realidad. Se han resignado y permanecen en la ignorancia. Uno de ellos es tocado por SOFÍA, rompe las cadenas y sale de la cueva al mundo de la auténtica realidad, y queda tan sorprendido del nuevo descubrimiento que siente la necesidad de entrar en la cueva a liberar al resto de las personas.
    Platón, en su libro “La República”, nos presenta una sociedad perfecta, utópica, pero esta sólo se puede conseguir por medio de personas sabias, ya que la sabiduría implica conocer el bien, y conocerlo implica ponerlo en práctica. Sólo el ignorante, que no puede conocer el bien, practica o acepta el mal.
    ¡Este cuento es una buena manera de enseñar a amar la sabiduría!

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    1. Gracias por esa glosa que nos hace volver la vista a los orígenes del amor a Sofía, o sea, de la filo-sofía.

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  2. Debió ser muy hermosa esa tal Sofía. Algunos rostros iluminan las paredes custodiadas de los lugares desordenados, y supongo que ella no quiso ser menos. Sabía cuándo ser explícita y cuándo emplear su cruel sutileza, a veces ambas cosas a la vez, pero siempre con la misma finalidad.
    Y quién sabe; quizá en algún momento logró cumplir su propósito. A lo lejos pueden verse caminos iluminados que llevan a alguna parte.
    Tan cómplice y tan lúcida, solía emplear estas tres palabras: "sabiduría, serenidad, y suerte".

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    1. Realmente esa Sofía ilumina el entendimiento y trata de enseñar el camino hacia la libertad.

      Y,sí, sigo diciendo lo mismo: con la lucidez de la sabiduría, la serenidad para valorar los problemas y enfrentarse a ellos y un poco de suerte... la vida estará plena de satisfacciones (añado otra palabra que comienza por "s").

      Gracias, Alejandro.

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  3. Hola Margarita.


    Soy un alumno tuyo de hace casi 40 años.Y digo bien cuando digo soy, porque nunca dejamos de ser alumnos de aquellos profesores que influyeron de una u otra manera en nuestras vidas.

    Eran los últimos estertores del dictador, Estrenabamos plan de estudios (el BUP); yo estrenaba también colegio, los Salesianos de San Blas, pero en realidad todo era nuevo, todo estaba por hacer, nuevas formas, nuevos métodos, democracia, partidos, sindicatos, políticos, apertura, debate, libertad, libro rojo del cole, participacion de estudiantes y padres en los colegios, conocimientos sin censura que salían de nuevo a la luz.

    Menudo puzzle en mentes tan poco conformadas como las nuestras en aquellos momentos.

    Pero nosotros tuvimos la suerte de dar con cinco profesores que para mi fueron fundamentales en mi futuro (lo digo a sabiendas de conocer ya casi 40 años de aquel futuro).

    Lo importante no era tanto el contenido, que también: aún recuerdo esas Cartas de Jovellanos que desmenuzamos con tu ayuda durante un trimestre, o aquel Quijote al que hoy en día la gente no quiere o no sabe acercarse. Lo importante fueron las herramientas que nos enseñasteis a utilizar: razonar, pensar, debatir con, buscar y encontrar otros puntos de vista, construir verdades superiores sumando ideas.

    Y todo esto en cada disciplina.

    Tú en la lengua y la literatura (aquellos análisis semánticos y sintácticos que luego nos ayudaron a comprender como el autor imprime su estilo para provocar sensaciones al lector)

    Felipe, en la Filosofía, acercándonos a las distintas formas de pensamiento humano, pero sobre todo a comprender que el hombre está en constante búsqueda y que no hay una única forma de pensamiento (por cierto, seguís casados ??).

    Don Javier, en la historia, ayudándonos a comprenderla con materiales que nunca habíamos manejado (periódicos, ensayos, cine) y contándonos la Historia, como si fuéramos observadores atemporales transportados a otros tiempos.

    Pepe Gangoso, en las Ciencias Con él aprendí todo lo que hoy se de Matemáticas, de Física o de Química. Nunca se repitió aquella maravillosa experiencia de divertirme con su forma de explicarnos los principios básicos

    Santiago Galve, que tanto nos ayudó a encajar espíritu crítico y religión. Sexualidad libre y responsable, respeto por la igualdad de derechos y respeto al diferente.

    Fueron solo tres años, pero con la perspectiva que me dan mis 52 años, segurarmente, por el momento histórico, por mi momento personal, por las circunstancias que se dieron, fueron los que conformaron buena parte de mi ser.

    Gracias Margarita, por educar, por educarme.

    Un beso de tu alumno (años 1976-1978)
    Paco Castillo Sánchez

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    1. ...Pero es consolador soñar
      mientras uno trabaja,
      que ese barco, ese niño
      irá muy lejos por el agua.
      Soñar que ese navío
      llevará nuestra carga de palabras
      hacia puertos distantes,
      hacia islas lejanas.

      Soñar que cuando un día
      esté durmiendo nuestra propia barca,
      en barcos nuevos seguirá
      nuestra bandera
      enarbolada.

      Son versos de un poema de Gabriel Celaya, que describen cómo nos sentimos los maestros (a mí me encanta la palabra) mientras educamos.

      Por recibir un gesto de gratitud como este, y como muchos otros que he recibido a largo y ancho de mi vida docente, vale la pena dedicar cuatro décadas a la labor educativa y acercarse a la jubilación con el mismo ánimo y las mismas ganas de enseñar y aprender.

      Siento mucho no poder poner cara en este momento a tu persona, pues son miles los alumnos a los que he enseñado a leer y disfrutar del Quijote, a ver la modernidad de las Cartas Marruecas (supongo que refieres a esa obra de Cadalso, no Jovellanos) y a conocer y amar los entresijos del idioma.

      Me alegra infinitamente saber que yo contribuí a formar tu persona y que aún hoy lo valores. Yo también recuerdo mucho a algunos de mis maestros y lo que contribuyeron a marcar mi vida personal y profesional.

      En ese minirrelato, con el que me despedía de las clases del Bachillerato el curso pasado, también estabas tú y todos los que contigo han sido alumnos míos. Si tienes relación con alguno, pásale el texto.

      Sigo trabajando con las palabras. Producto de ese trabajo es este blog, artículos, conferencias y un estudio lingüístico editado (“El habla tradicional de la Omaña Baja”, del que se pueden encontrar muchas referencias en la red).

      Quiero agradecerte tu comentario y recuerdo con esa palabra maravillosa que solo se posee cuando se da: ¡GRACIAS! Seguro que los demás profesores citados también la suscriben; de forma especial, Felipe.

      Como no es este el lugar adecuado para otras informaciones de tipo personal, si quieres contactar conmigo o darme algún dato para que lo haga yo, ya sabes donde puedes seguir encontrándome.

      "Por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida". Sigue valiendo la pena la máxima cervantina...

      A buen seguro que has hecho tuyo el mensaje del texto y mantienes nuestra bandera enarbolada.

      Un abrazo.

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  4. Tolerancia, gratitud y respeto, tres palabras que encierran una forma de vivir, si añadimos educación, conocimiento y libertad estariamos hablando de una maravillosa forma de vivir. Corto pero muy claro tu cuento. Un abrazo.

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